Con más de 200 Razones para Mirar al Cielo: Bogotá se destaca y es protagonista en el Global Big Day 2025
● La capital se unió al Global Big Day, el conteo de aves más importante del mundo, con recorridos en cerros, humedales, zonas rurales y territorios ancestrales.
● Turismo Bogotá lideró acciones para visibilizar la biodiversidad de Bogotá y fortalecer el turismo de naturaleza en clave comunitaria.
Bogotá, 10 de mayo de 2025. Este sábado, la capital colombiana vivió una jornada memorable en el marco del Global Big Day 2025, el evento de avistamiento de aves más importante del planeta. Con el acompañamiento de la Oficina de Turismo de Bogotá, la ciudad se sumó a esta movilización global que une a expertos, estudiantes, comunidades locales y amantes del aviturismo, en torno a la biodiversidad y la conservación.
Bogotá contó con la participación activa en cuatro puntos emblemáticos de su geografía, que reflejan la diversidad de ecosistemas y la riqueza cultural de sus territorios. Desde los Cerros Orientales, pasando por los humedales urbanos, las zonas rurales del suroriente y los territorios ancestrales, los recorridos liderados por organizaciones comunitarias, guías locales y entidades aliadas permitieron registrar especies, intercambiar saberes y fortalecer la apropiación del patrimonio natural de la ciudad.
Turismo Bogotá acompañó estos espacios como parte de su estrategia para consolidar a Bogotá como un destino turístico sostenible, especializado y comprometido con la vida en todas sus formas. Las actividades destacadas incluyeron:
● En el sendero Vicachá, en los Cerros Orientales, se desarrolló una caminata de observación en alianza con el Jardín Botánico de Bogotá, resaltando la conexión espiritual y ecológica de este corredor natural.
● En el Humedal Salitre, uno de los ecosistemas más vitales de la ciudad, se realizó un ejercicio de conteo con el respaldo de la Policía de Turismo, visibilizando el papel de estos espacios en la regulación hídrica y la vida silvestre.
● En la Reserva de Chiguaza (Usme Rural), jóvenes del territorio lideraron recorridos que pusieron en valor la biodiversidad del suroriente y las apuestas comunitarias por el turismo como vía de conservación.
● En el Cabildo Indígena Muisca de Suba, se integraron conocimientos ancestrales y prácticas ambientales actuales, promoviendo el relevo generacional mediante semilleros juveniles.
Además, queremos resaltar el compromiso de quienes se sumaron desde lugares tan importantes como los caminos de Guadalupe Aguanoso en los kilómetros 11 y 12, las quebradas del sector, el Parque Arqueológico de Usme y muchos otros rincones que, incluso desde sus parques de barrio, aportaron con entusiasmo a esta gran jornada.
Durante la jornada, el director del Turismo Bogotá, Andrés Santamaría Garrido, destacó que “Hoy, Bogotá demostró que su riqueza no solo se mide en calles y edificios, sino en el canto de sus aves, en la vitalidad de sus humedales y en la sabiduría de sus comunidades. El Global Big Day 2025 fue más que un evento de avistamiento; fue una celebración de nuestra biodiversidad y un paso firme hacia un turismo que respeta y enaltece la vida en todas sus formas. Bogotá tiene 200 razones para mirar hacia el cielo, recordándonos la conexión profunda entre la naturaleza y la ciudad. Desde la Oficina de Turismo de Bogotá, seguimos comprometidos con un modelo turístico que une a las personas con su entorno, que educa, que transforma y que construye una ciudad más consciente y sostenible.”
De esta manera Bogotá reafirmó su compromiso con la promoción de experiencias turísticas responsables, que parten del respeto por la naturaleza y del reconocimiento del conocimiento local como eje de transformación social.
Con esta jornada, Bogotá no solo sumó registros a la plataforma global de eBird, sino que fortaleció lazos entre comunidad, territorio y sostenibilidad, demostrando que el turismo también es una herramienta de educación, conservación y bienestar colectivo.
El Global Big Day 2025 dejó huella en la ciudad y reafirmó que en Bogotá la vida se celebra observando, cuidando y aprendiendo del vuelo libre de las aves.